La conexión a tierra, también conocida como earthing, es la práctica de conectar con la Tierra descalzo sobre el suelo o tocando superficies metálicas conectadas a tierra. Se dice que esta conexión íntima entre la Madre Tierra y tu piel controla el dolor, reduce la tensión arterial y refuerza el sistema inmunitario.
La práctica de la conexión a tierra tiene sus raíces en la física de la conexión a tierra, y se utiliza como una forma de explicar cómo el campo eléctrico de la Tierra puede afectar a tu cuerpo. En física, la conexión a tierra es el proceso de eliminar el exceso de carga eléctrica de un objeto transfiriendo electrones a otro objeto. Cuando un objeto cargado está conectado a tierra, el exceso de carga se equilibra mediante la transferencia de electrones entre el objeto cargado y la tierra.
Las señales eléctricas de nuestros cuerpos interactúan con el campo electromagnético del planeta, y la Tierra actúa como una gran batería para recargar nuestros cuerpos. Sin embargo, muchos de nosotros no aprovechamos los beneficios de esta recarga porque llevamos zapatos con suelas que interfieren en nuestra capacidad de recibir los electrones libres de la Tierra.
¿Cómo influye el enraizamiento en tu salud?
Aunque la ciencia que subyace al grounding no se ha investigado tanto como otros temas, pequeños estudios han demostrado que esta práctica puede mejorar la salud, como estimular el sistema inmunitario, reducir la frecuencia cardiaca y mejorar salud mental. Irónicamente, la mayoría de los estudios ni siquiera se realizaron en el exterior, sino que se basaron en colchonetas y colchones cargados de electricidad que imitaban el campo electromagnético natural de la Tierra.
Otros beneficios potenciales de la conexión a tierra son
- Niveles más bajos de inflamación
- Mejora el estado de ánimo
- Menos dolor, especialmente cuando está relacionado con el ejercicio
Cinco maneras de practicar la conexión a tierra
Al igual que absorbemos vitamina D del sol, la tierra bajo nuestros pies proporciona beneficios a nuestro cuerpo. Tocar la tierra con los pies descalzos es sólo una forma de practicar la conexión a tierra, pero aquí tienes otras formas de practicar la conexión a tierra que podrías incorporar a tus rutinas:
Sumergir en agua
Al practicar la conexión a tierra, el agua puede utilizarse para conectarse a tierra del mismo modo que la Tierra. Puedes hacer algo tan sencillo como ponerte de pie en un charco o sumergirte por completo en una masa de agua natural, como un lago natural, un río, un arroyo o el océano.
Utiliza equipos de puesta a tierra
Cuando no puedas salir al exterior para practicar la conexión a tierra (debido al tiempo u otras circunstancias), puedes utilizar equipos de conexión a tierra. Al igual que en los estudios mencionados anteriormente, los equipos de conexión a tierra imitan las frecuencias electromagnéticas de la Tierra. Existen esterillas, sábanas, calcetines, muñequeras, parches y varillas de conexión a tierra que consiguen el mismo objetivo de conectar con la Tierra.
Haz ejercicio descalzo
Aunque no siempre es la mejor idea, hacer ejercicio descalzo cuando puedas es una buena forma de obtener los beneficios mentales y físicos del enraizamiento. Conectar con la tierra desnuda puede ayudarte a enraizarte emocionalmente, y hacer ejercicio es una forma de mejorar tu salud en general.
Jardín sin guantes
La jardinería es buena para el medio ambiente, y para tu salud. Cuando cultivas sin guantes, conectas con la Tierra no sólo de forma física, sino también emocional. Plantar nueva vida en el suelo y cuidar de la Tierra y de lo que produce también puede ayudarte a sentirte más conectado con el mundo que te rodea.
Abraza un árbol
"Abrazador de árboles" puede ser un apodo para una persona concienciada con el clima, ¡pero el acto de abrazar un árbol puede en realidad mejorar tu salud! Abrazar un árbol aumenta los niveles de la "hormona del amor" oxitocina, que te hace sentir tranquilo. Al abrazar un árbol, la serotonina y la dopamina también actúan para hacerte sentir más feliz.
La importancia de conectar con la naturaleza
El dicho "Eres lo que comes" se aplica a algo más que a la comida. Alimentación PrimariaEs la idea de que tú y tu salud sois la suma no sólo de todo lo que comes, sino también de las personas con las que te relacionas, los lugares a los que vas, los vínculos que estableces y lo que creas.
Considera lo que tu cuerpo toca durante todo el año: el suelo. Practicar el grounding es una forma liberadora de conectar con la Madre Tierra. Se ha demostrado que la tierra tiene un poderoso efecto sobre el estado de ánimo y salud mental debido a su contenido mineral, y el enraizamiento ofrece la oportunidad de absorber esa energía positiva.
El tacto es un componente crucial de la salud y el bienestar generales. Tiffany Field, directora del Instituto de Investigación del Tacto de la Facultad de Medicina Miller de la Universidad de Miami, descubrió en su investigación que ser tocado o abrazado antes de enfrentarse a una situación estresante producía un mejor rendimiento en las pruebas cognitivas que no recibir ningún contacto físico.
Si te sientes cansado, débil o agotado, puede que no estés recibiendo suficiente energía de la Tierra. El grounding es una forma estupenda de conectarte con la naturaleza e incluso de mejorar tu salud. Empieza hoy mismo paseando por tu barrio: Busca zonas con hierba y quítate los zapatos y los calcetines. Planta esos pies descalzos en la Madre Tierra y pasea, siéntate, túmbate, juega, ¡lo que quieras! Al conectar con la naturaleza y permitirte sentir su energía, experimentarás una mayor sensación de bienestar.