Aunque a menudo decimos que la alimentación sana empieza con lo que hay en el plato, el verdadero reto tiene lugar antes incluso de llegar a sentarnos a comer. Empieza con lo que tienes en la despensa y el frigorífico.

Si compras alimentos procesados, será mucho más difícil evitarlos una vez los hayas pagado y traído a casa. Sin embargo, si abasteces tu cocina con ingredientes sanos, es más probable que comas alimentos sanos la mayor parte del tiempo.

Por supuesto, esto no significa que no puedas darte un capricho de vez en cuando; de hecho, la moderación es uno de los conceptos básicos de la Nutrición Integrativa, pero empezar con una base sólida de alimentos reales marca una gran diferencia.

Éstos son algunos de nuestros productos básicos saludables favoritos para la despensa y el frigorífico.

Despensa general

• Variedad de tus tés favoritos
• Mantequilla de frutos secos o semillas (almendra, cacahuete o semillas de girasol)
• Semillas de chía
• Miel cruda o sirope de arce
• Harina de repostería sin gluten o integral
• Extracto de vainilla
• Frutos secos crudos (anacardos, nueces o nueces de Brasil)
• Semillas de calabaza
• Semillas de cáñamo

Granos

• Quinoa
• Arroz integral
• Fideos de arroz
• Trigo sarraceno
• Copos de avena integrales

 Legumbres

• Alubias negras
• Otras alubias (cannellini, riñón o pinto)
• Lentejas francesas, rojas o verdes
• Garbanzos
• Judías mungo

Especias y condimentos

• Sal marina del Himalaya o celta
• Pimienta negra
• Cúrcuma
• chile en polvo
• Canela
• Levadura nutricional

Aceites

• Aceite de oliva virgen extra
• Aceite de coco
• Ghee

Vinagres

• Vinagre de manzana
• Vinagre de umeboshi
• Vinagre de arroz

 Frigorífico general

•  Huevos ecológicos
• Leche de almendras, coco o cáñamo
• Yogur o kéfir (si toleras los lácteos)
• Mantequilla ecológica

Productos a temperatura ambiente

• Ajo
• Cebollas/chalota
• Aguacates
•  Manzanas
• Plátanos
• Batatas o boniatos
•  Calabaza butternut, delicata o spaghetti

Productos refrigerados

• Lechuga de hoja roja o verduras variadas
• Zanahorias
• Limones
• Brotes
• Kale
• Pepino
• Brócoli
• Champiñones (portobello, shiitake o crimini)
• Espinacas
• Bayas (fresas, arándanos o frambuesas)
• Calabacín

Hierbas frescas

• Rosemary
• Tomillo
• Cilantro

Añadidos ocasionales

• Chocolate negro
• Galletas de arroz o tortitas de arroz
• Galletas de semillas de lino
• Carnes ecológicas
• Pan recién horneado
• Anchoas o sardinas
• Aceitunas
• Queso
• Hummus

Ten en cuenta que no estamos sugiriendo que salgas y compres TODAS estas cosas a la vez, ¡ni que compres sólo estas cosas! Refinar tu cocina es un proceso que puede requerir un poco de tiempo de transición y experimentación.

Empieza por revisar lo que tienes actualmente y eliminar cualquier cosa caducada, claramente insana o simplemente insatisfactoria. Luego empieza a incorporar lentamente algunos de los elementos anteriores. Con el tiempo, te verás rodeado de ingredientes sencillos y saludables, fáciles de comprar y de convertir en comidas sanas y deliciosas. En caso de duda, recuerda las sabias palabras de Michael Pollan: "Come comida. No demasiada. Sobre todo plantas".

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