Durante la moda del bajo contenido en grasas de finales de los 80 y principios de los 90, los frutos secos fueron vilipendiados en la cultura popular como causa de obesidad y enfermedades cardiacas. 

Los frutos secos tienen muchas calorías, razón por la que mucha gente les teme, pero ¿sabes qué? Contar calorías ya no es eficaz. Ahora sabemos que se trata de calidad sobre cantidad y las calorías de los frutos secos proceden de la grasa de alta calidad que es crucial para que todos los órganos funcionen correctamente, especialmente el cerebro. Si quieres mantener un enfoque agudo de la energía, cómete las nueces. 

Los frutos secos son potencias nutricionales que ofrecen toneladas de increíbles beneficios para la salud. A menos que tengas alergia a los frutos secos, ¡no hay razón para no disfrutarlos como parte de una dieta equilibrada! 

¿Listo para aprender a maximizar tu salud mediante la elección consciente y deliciosa de frutos secos? ¿Qué prefieres, crudos, tostados o remojados? ¿En pesto, dulces para untar o directamente? Sigue leyendo para conocer nuestros frutos secos favoritos y cómo puedes disfrutarlos.   

Almendras. Las almendras son uno de los tentempiés saludables más populares en la oficina del IIN, y por una buena razón. Los estudios han demostrado que reducen el colesterol LDL (el malo) y protegen la salud del corazón.

También tienen un alto contenido en magnesio, que mejora la digestión y la circulación. Las almendras son un verdadero superalimento - los beneficios aquí comentados son sólo la punta del iceberg. 

Nuestra forma favorita de disfrutar de las almendras es en forma de leche de almendras cremosa y rica. Para hacerla tú mismo, sólo tienes que remojar las almendras en agua filtrada sobre la encimera durante toda la noche, desechar el agua de remojo y licuarlas con agua fresca. Pasa la mezcla por una bolsa para leche de frutos secos y disfrútala. 

Nueces de Brasil. Estas cremosas nueces fueron temidas durante mucho tiempo por su altísimo contenido en grasa (incluso mayor que el de la mayoría de los frutos secos). Ahora se consideran uno de los frutos secos más sanos precisamente por eso.

A medida que nos alejamos de la era de la nutrición moderna y de la moda del bajo contenido en grasa, la gente reconoce la verdad de que la grasa es crucial para una salud óptima y que los productos llenos de azúcar y bajos en grasa son las cosas más perjudiciales que puedes meter en tu cuerpo. 

Nos encantan las nueces de Brasil crudas combinadas con arándanos: la combinación es deliciosa y aporta toneladas de grasas cardiosaludables y antioxidantes. 

Anacardos. Los anacardos son una opción popular por su delicioso sabor y su textura cremosa. Algo especial de los anacardos es que tienen un nivel increíblemente alto de cobre, un mineral esencial para el cerebro, el corazón, el hígado, los riñones y la función muscular. 

Nos encanta añadir anacardos a los salteados de verduras sazonados con tamari y salsa de chile. La combinación de sabores asiáticos y los ricos anacardos con sabor a nuez es increíble. 

Avellanas. Las avellanas contienen niveles muy altos de folato, estupendo para reducir el riesgo de depresión y enfermedades cardiacas. También aportan mucha fibra, estupenda para la digestión.

Puede que asocies automáticamente las avellanas con cierta crema icónica de chocolate y avellanas, y si es así, tengo buenas noticias para ti: ¡Hay una versión saludable! Simplemente echa avellanas, polvo de cacao crudo, vainilla, sirope de arce puro, aceite de coco, un poco de sal y tu leche no láctea favorita en una batidora de alta velocidad o en un robot de cocina, bate hasta que quede cremoso y ¡a disfrutar! 

Nueces de macadamia. Muy populares en Australia, las nueces de macadamia están llenas de minerales y grasas saludables. Tienen un sabor natural, suave y dulce, y constituyen una leche maravillosamente rica y estimulante para el cerebro. 

Ricas en vitamina del complejo B, las macadamias ayudan mucho a las glándulas suprarrenales y al sistema nervioso, contrarrestando los efectos del estrés y la ansiedad. Prueba a utilizar leche de macadamia en tu próximo café con leche casero y disfruta de su cremosidad ligeramente dulce. 

Pistachos. Los pistachos son una fuente asombrosa de proteína a base de plantas , estupenda para estabilizar el azúcar en sangre y reducir el riesgo de diabetes del adulto, también conocida como diabetes de tipo 2. También favorecen la salud de la piel y liberan al organismo de los dañinos radicales libres. 

Haz un delicioso pesto de pistachos mezclando unas hojas de kale con pistachos, albahaca, aceite de oliva, sal y pimienta. Úsalo como salsa para las verduras o mézclalo con tu pasta o sustituto de la pasta favorito, como los fideos de calabacín.

Nueces. Un secreto de las nueces es que te conviene comerte la piel: contiene el 90% de los fenoles, conocidos por prevenir el cáncer gracias a su gran cantidad de antioxidantes. 

Nos encanta usar nueces como costra sin gluten para el pescado o el pollo. Sólo tienes que rebozar tu proteína en nueces molidas, hornearla o dorarla en aceite de oliva, y espolvorearla con sal y tus hierbas favoritas. ¡Que aproveche! 

Hay tantos beneficios para la salud en todos los frutos secos que tenemos a nuestra disposición, y tantas formas de disfrutarlos. Entonces, ¿cuál es el método de preparación más saludable para los frutos secos?

Crudos, remojados o tostados en seco son las formas más sanas de preparar los frutos secos. 

Cuando sepas de dónde proceden tus frutos secos, cómo se preparan y los beneficios específicos que aportan los distintos tipos, podrás tomar decisiones informadas para alimentar tu cuerpo único. 

Advertencia: Los frutos secos pueden volverse rancios y mohosos con facilidad, lo que provoca un exceso de cándida en el organismo y todos los problemas que ello conlleva. 

Lo mejor es guardarlos en el congelador para mantenerlos frescos. Asarlas en aceite también hace que se pongan rancias más rápidamente y, obviamente, añadir cualquier grasa insana o trans en el proceso de preparación las convierte de superalimento en el malo de la película. 

Nota: Los frutos secos contienen ácido fítico, que elimina minerales importantes del organismo e inhibe la digestión. No mola. ¿La buena noticia? Basta con remojar los frutos secos de 8 a 12 horas y desaparece. 

¿Cuál es tu forma favorita de disfrutar de los frutos secos? ¿Has aprendido algo nuevo en este artículo? Compártelo en los comentarios de abajo: estamos impacientes por saber de ti. ¡Hazte sociable! Compártelo con tus amigos en Facebook y Twitter.