Resulta que los alimentos fermentados hacen mucho más que mejorar la digestión. Estudios recientes demuestran que desempeñan un papel importante en la reducción de la ansiedad. ¿No es increíble?
La gente lleva fermentando alimentos para conservarlos desde el Neolítico, y ahora es una de las tendencias más candentes en salud y bienestar. ¿Por qué? Porque los alimentos fermentados contienen muchas bacterias saludables llamadas probióticos, que son cruciales para la salud intestinal.
Aunque la gente suele pensar que las bacterias son una fuente de infecciones, en realidad tus intestinos están llenos de muchas bacterias buenas. Tener un equilibrio saludable de bacterias en el intestino -lo que los científicos denominan "microbioma"- es esencial para el sistema inmunitario, el metabolismo, la síntesis de vitaminas y mucho más.
Resulta que el 95% de la serotonina del cuerpo -la hormona de la felicidad- también vive en el intestino, por lo que tener un microbioma sano también ayuda a mantener una mentalidad positiva y evitar la depresión.
El cortisol es la hormona del estrés, básicamente opuesta a la serotonina, y un estudio reciente de la Universidad de Oxford demuestra que el consumo de prebióticos -alimentos que alimentan a los probióticos para crear un intestino sano- reduce la respuesta del cortisol, mejorando salud emocional.
Como afirma el estudio:
"Actualmente existen pruebas convincentes de la relación entre la microbiota entérica y la función cerebral. La ingestión de probióticos modula el procesamiento de la información que está fuertemente vinculada a la ansiedad y la depresión, e influye en la respuesta neuroendocrina al estrés."
Traducción: Comer alimentos prebióticos y probióticos reduce el estrés, la ansiedad y la depresión.
He aquí un secreto: no necesitas gastarte mucho dinero en suplementos de lujo para disfrutar de estos increíbles beneficios para la salud. ¡Tanto los prebióticos como los probióticos están disponibles en las estanterías de tu supermercado!
Entre los alimentos prebióticos están el ajo, la cebolla, el puerro, las verduras de amargón y los espárragos crudos. Estos alimentos alimentan las bacterias saludables de tu intestino. Entre los alimentos probióticos están las verduras fermentadas de forma natural, el kéfir, la kombucha y el tempeh, por nombrar algunos.
Los prebióticos alimentan a los probióticos, lo que conduce a un intestino feliz.
Comer estos alimentos es la forma más sencilla de construir un microbioma sano para que puedas tener más energía, librarte de la ansiedad, perder peso y evitar las enfermedades crónicas.
Lo mejor es que hagas tú mismo los alimentos fermentados en casa, porque entonces contienen vitamina L, por amor. Los alimentos hechos en casa son naturalmente mucho más sanos porque sabes exactamente lo que contienen. ¿Estás de acuerdo?
Puedes aprender mucho más sobre los increíbles beneficios de los probióticos en el plan de estudios del IIN, para que puedas empezar a sentirte más sano y feliz y luego compartir ese conocimiento con amigos, familiares y clientes.
¿Hasta qué punto conoces los beneficios de los prebióticos y los probióticos? ¿Cuáles son tus alimentos favoritos que contienen estas asombrosas bacterias? Compártelos en los comentarios a continuación.
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