5 maneras de disfrutar estudiando en verano

El verano suele asociarse con pasar tiempo en la naturaleza, relajarse en la piscina y viajar a nuevos destinos divertidos... no estudiar. Pero a veces, ¡merece la pena!

Si estás en el camino hacia algo significativo -aprender sobre un tema que realmente te interesa-, estudiar en verano es algo normal para cumplir tus sueños. Y tampoco tiene por qué ser una pesadez. Con un poco de creatividad y planificación, puedes estudiar con todas tus fuerzas Y pasar un verano estupendo.

Nota: reflexiona sobre elegir el programa adecuado antes de empezar, y ten en cuenta la vida. Un curso que te permita estudiar en tu tiempo libre, que integre una variedad de medios para que el aprendizaje resulte atractivo y que incorpore métodos de interacción te ayudará a disfrutar de la experiencia y te garantizará el éxito.

Aquí tienes 5 formas de ser alegremente estudioso en verano:

1. Crea un horario
   Revisa tus materiales para encontrar el tiempo de estudio semanal estimado, y crea un horario que funcione para ti. Si te ciñes a tu horario, siempre sabrás qué días no lectivos tienes libres, y podrás planificar tus aventuras en torno a ellos.
2. Sé flexible con tu horario
   Las sorpresas suelen llegar cuando menos las esperamos, así que mantente "responsablemente abierto" a las posibilidades. Eso significa que si tus amigos te invitan inesperadamente a un viaje por carretera de una semana de duración, busca la forma de que funcione sin retrasarte en tus estudios. Tal vez puedas hacer algún trabajo por adelantado antes de irte, escuchar clases durante el viaje o planificar un tiempo sólido para ponerte al día cuando termines. No se trata de decir que no y luego lamentarte por ello, sino de ser adaptable.
3. Socializa con el aprendizaje
   Encerrarte a solas con tus libros es una forma segura de aburrirte y sentirte lleno de resentimiento. Encuentra una forma de interactuar con otras personas mientras estudias. Tal vez puedas conectar con compañeros de estudios de tu zona, programar llamadas de Skype en grupo con los que no están cerca, o encontrar un espacio de co-working para, al menos, estudiar solo pero en un entorno de grupo comunitario. Rodearte de personas positivas que también trabajan o estudian en verano te ayudará a que la experiencia sea mucho más fácil.
4. Lleva tus estudios sobre la marcha
   Puede que esto no funcione para todo el mundo, pero ¿quién dice que no se puede aprender en la playa? Llévate tus libros, cuadernos de trabajo u ordenador portátil dondequiera que vayas. Mientras te dediques a mantener la concentración y a anotar la información importante, podrás estudiar en cualquier parte.
5. Recompénsate
   Ya sea con una saludable dosis de chocolate negro cócteles con tus amigas, o tu ritual favorito de autocuidado , encuentra formas de recompensarte en logros grandes y pequeños. ¡Te lo mereces!

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¿Tienes pensado estudiar este verano? ¡Comparte con nosotros a continuación tus consejos para mantener la concentración!