El autismo es un complicado trastorno del desarrollo, con multitud de factores que contribuyen a él y sin causa ni cura únicas conocidas. Sin embargo, un nuevo y sorprendente estudio demuestra que una vitamina común que se encuentra en nuestros alimentos y suplementos puede reducir drásticamente el riesgo de que una mujer tenga un hijo con autismo: ¡en un 40%!

Según el estudio, se ha demostrado que el ácido fólico, una vitamina B presente en alimentos como las espinacas, las judías y la carne, reduce significativamente la incidencia del autismo cuando la vitamina se toma como suplemento durante al menos varias semanas antes y durante el embarazo.  

Para obtener todos los beneficios, se recomienda a las mujeres que empiecen a tomar suplementos de ácido fólico cuatro semanas antes de concebir, y que sigan tomándolo durante las ocho primeras semanas de embarazo. En un artículo de NPR, el autor del estudio, Ian Lipkin, explica que, aunque ciertos alimentos son una gran fuente de vitamina B, no es necesariamente suficiente, porque sólo absorbemos aproximadamente la mitad del folato de los alimentos que ingerimos.

"La idea de que un complemento alimenticio muy sencillo y no tóxico pueda reducir tu riesgo es profunda", afirma Lipkin.

Se ha demostrado que el ácido fólico tiene enormes beneficios para la salud de la mujer, incluida la prevención del cáncer de cuello de útero y del aborto espontáneo. Ahora, reducir el riesgo de autismo durante el embarazo puede ser una razón más para considerar añadir este suplemento a tu dieta.   

En Nutrición Integrativa, creemos que cada persona tiene sus propias necesidades nutricionales, que llamamos bioindividualidad. Dado que cada uno de nosotros tiene su propio tipo de cuerpo, estilo de vida, tasa metabólica y antecedentes genéticos, no existe una única forma de comer que funcione para todos, ni una dieta única para todos. Para obtener una perspectiva sobre el estudio, preguntamos a los miembros de nuestro propio personal qué alimentos y suplementos funcionaban para su familia durante el embarazo:

"Tomé una vitamina prenatal orgánica basada en alimentos, mucho aceite de hígado de bacalao y omega-3 durante todo el embarazo. Tomé suplementos de calcio, magnesio y vitamina D-3 utilizando una mezcla en polvo de buena absorción. También tomé un suplemento en polvo de verduras superalimento la mayoría de los días para aumentar mi ingesta de oligoelementos, fitoquímicos y probióticos. Aparte de eso, simplemente comía mucha comida buena y confiaba en que mi cuerpo me indicaría que comiera lo que yo (y mi bebé en crecimiento) necesitáramos." - Bailey, Marketing 

"Como nutricionista, he sido hipersensible a la cuestión de obtener suficiente (y no demasiado) folato durante el embarazo. En mis esfuerzos por obtener suficiente folato, sigo una dieta muy rica en verduras y bebo zumo verde al menos dos veces por semana. También he elegido un suplemento prenatal basado en alimentos llamado Prenatal One de Rainbow Light porque también quiero evitar suplementarme en exceso con megadosis. Pienso seguir tomando mi prenatal durante la lactancia, y asegurarme de que mi hijo o hija adopta también una dieta rica en verduras." - Jessica , Educación

"Tomé una vitamina prenatal rica en ácido fólico y aceite de pescado antes de quedarme embarazada, y durante todo el embarazo y la lactancia. Había investigado mucho sobre cómo tener un embarazo sano, ya que también soy doula y asesora de lactancia. Durante el embarazo, en general me preocupaba tener la mejor salud posible para poder tener el parto en casa que estaba planeando (¡lo hice!). Tomé vitaminas prenatales y reduje el estrés, que trabajé haciendo yoga prenatal con la graduada del IIN Latham Thomas." - Aisha , Inscripción

¿Tomas algún suplemento para promover la salud reproductiva?