Tanto el yoga como pilates son excelentes ejercicios y, en algunos casos, se han mezclado en "yogalates" y variaciones similares. Pero ¿en qué se parecen y en qué se diferencian? Lo que busques obtener de una rutina de ejercicios te ayudará a determinar qué práctica puede funcionar mejor para ti.
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pilates fue creado a finales de la Primera Guerra Mundial por el alemán Joseph "Joe" pilates, quien, como había padecido enfermedades a menudo de niño, buscaba una forma de mejorar su salud y su resistencia. Se enamoró de la imagen griega clásica del hombre ideal -equilibrado en cuerpo, mente y espíritu- y empezó a desarrollar su propio sistema de ejercicios basado en ese concepto. Al principio, pilates se utilizó para rehabilitar a soldados heridos y se llamó Controlología, adoptando sólo el nombre de su creador algunos años más tarde.
Tras trasladarse a América, Joseph pilates abrió un gimnasio en Nueva York; atraía a famosos y bailarines profesionales -entre ellos los famosos George Balanchine y Martha Graham- que buscaban recuperarse de lesiones y prevenir otras nuevas.
La popularidad de esta práctica creció en la década de 1970, cuando uno de los alumnos de pilatesla introdujo entre las estrellas de cine de Beverly Hills, California. El ejercicio de peso corporal era especialmente atractivo en aquella época porque la mayoría de las estrellas querían evitar el aumento de peso mediante el levantamiento de pesas, optando por una figura esbelta (aunque ahora sabemos que el entrenamiento de fuerza no equivale a "aumentar de peso"). La Fundación pilates calcula que actualmente hay unos 12 millones de personas que practican pilates .
Esta práctica se centra en movimientos que utilizan los músculos estabilizadores de la espalda y el tronco. Los ejercicios del tronco "mejoran el equilibrio y la estabilidad, lo cual es importante cuando vas andando por la calle y te saltas un bordillo o resbalas en el hielo, o cuando haces ejercicio para evitar lesiones", dice Nina Zorfass, entrenadora personal y diplomada del IIN. La fuerza del tronco incluye la parte media y baja de la espalda, que influye en tu postura y, a su vez, en todo tu cuerpo. Si tu postura es incorrecta, puede afectar a todo, desde cómo caminas hasta cómo sostienes la cabeza. "Fortalecer el tronco protege la columna vertebral, lo que es clave tanto para la postura como para cuando te mueves a diario", explica Zorfass.
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El yoga es una antigua práctica que implica meditación, trabajo respiratorio y movimiento para promover el bienestar físico, mental y espiritual. El yoga se originó como una práctica espiritual, y aún se practica como tal en muchas partes del mundo. Sus orígenes se remontan al norte de la India, hace más de 5.000 años, y se mencionó por primera vez en unos antiguos textos sagrados llamados Rig Veda. El yoga es una de las seis escuelas filosóficas del hinduismo y también es una parte importante del budismo.
Como todo ejercicio, el yoga eleva tu ritmo cardíaco. "Otros beneficios del yoga son la mejora de la fuerza, la flexibilidad y la circulación", dice la instructora de yoga Janelle Laurito. Por muy tranquilas que parezcan esas posturas, muchas de ellas requieren práctica y bastante habilidad atlética.
El yoga es una opción de movimiento saludable que puede desafiar a cualquier tipo de cuerpo, impulsar el metabolismo y mejorar el tono en todas las zonas del cuerpo. El yoga puede:
Además del uso de una esterilla para practicar, existen varias similitudes entre el yoga y pilates. Ambos son ejercicios de bajo impacto que se centran en fortalecer el cuerpo. Ambos entrenamientos te ayudarán a alcanzar tus objetivos, si es lo que buscas:
Otra similitud clave entre ambos es el aprovechamiento de la mente y el cuerpo. pilates se centra en el control de la respiración durante los entrenamientos, al igual que el yoga. Y aunque pilates no es, en sí mismo, un ejercicio meditativo, pueden incorporarse técnicas de respiración si así lo deseas. La meditación tiene muchas formas; puede mejorar la concentración, reducir la sensación de estrés y ansiedad y ayudarte a dormir mejor.
La diferencia clave entre pilates y el yoga es el aspecto de espiritualidad. pilates nunca se desarrolló con espiritualidad en mente, sólo la mejora de la capacidad atlética, la resistencia y el aumento del tiempo de recuperación. Aunque ahora vemos todos esos beneficios tanto en el yoga como en pilates, el yoga se desarrolló originalmente como una práctica espiritual. El yoga trabaja para combinar el bienestar espiritual y el físico.
Qué práctica funcionará mejor para ti depende de varios factores, entre ellos:
Sin conocer tus necesidades específicas, es imposible decir qué ejercicio es el mejor. Si buscas orientación, las personas con conocimientos en estas áreas son un gran recurso. Los entrenadores personales y los Health Coaches actúan como mentores y guían a los clientes en la realización de los cambios que buscan.
Aunque hay muchos puntos en común entre el yoga y pilates, ambas prácticas son intrínsecamente diferentes. El yoga no se centra tanto en el trabajo del tronco como pilates ; en su lugar, trabaja la fuerza y la flexibilidad de todos los músculos. pilates no tiene el aspecto espiritual del yoga, que funciona como un entrenamiento más que como una sesión de iluminación espiritual.
Antes de empezar cualquier nuevo régimen de entrenamiento, consulta a tu médico para asegurarte de que es seguro, teniendo en cuenta tu salud y capacidades actuales.