"Salud intestinal" es un término que está de moda, pero ¿qué implica y, lo que es más importante, cómo se consigue?
Buena salud intestinal se refiere a la digestión y absorción adecuadas de los alimentos, al equilibrio de las bacterias beneficiosas del microbioma y, en general, al mantenimiento de un sistema gastrointestinal (GI) sano. (GI) gastrointestinal (GI).
Tu intestino desempeña un papel enorme en tu salud holística porque tu intestino afecta a todo. Desde el apoyo a tu estado de ánimo hasta la creación de nutrientes que tu cuerpo puede utilizar para regular el apetito, la salud intestinal puede influir positivamente en muchos aspectos de tu bienestar.
Como puedes imaginar, si tu intestino tiene el potencial de influir buena salud, también puede causar mala salud y un sinfín de problemas, como:
Para mantenerte en la cima de tu bienestar, cuidar de tu salud intestinal es una prioridad absoluta. Parte de esto incluye conocer los signos de una salud intestinal menos que ideal, para que puedas abordarlos rápida y correctamente:
Un indicador importante de que tu intestino necesita nutrirse es la función inmunitaria Disminución. Esto puede manifestarse como enfermar con frecuencia, permanecer enfermo más tiempo (la recuperación de la enfermedad lleva más tiempo) e incluso responder menos a los tratamientos típicos.
Los alimentos que comes son importantes para mantener la composición bacteriana que afecta a tus células inmunitarias. Más del 70% del sistema inmunitario ¡vive esencialmente en el intestino!
El desequilibrio hormonal también puede estar relacionado con problemas de salud intestinal. Las hormonas son mensajeros químicos que regulan todas las funciones y procesos de tu cuerpo; probablemente estés familiarizado con el cortisol, la hormona del estrés, así como con las hormonas sexuales estrógeno y testosterona.
Cuando tus hormonas están desequilibradas -tienes demasiadas o muy pocas de determinadas hormonas- pueden aparecer síntomas como cambios de humor, aumento de peso, dificultades sexuales y de fertilidad, y pérdida de sueño. Los desequilibrios hormonales pueden ser difíciles de identificar, abordar y volver a equilibrar, pero no imposibles, sobre todo con el apoyo del profesional adecuado.
Puede ser necesario investigar tu salud intestinal si experimentas intolerancias alimentarias. ¿Cómo sabes cuándo te acercas a la intolerancia a determinados alimentos? Dolor de vientre, diarrea, gases, dolores de cabeza... ¡la lista continúa! Los indicios de intolerancia alimentaria son la forma que tiene tu cuerpo de decirte: "Me está costando mucho descomponer este alimento, y aún más utilizarlo para mantenerte sano".
Aunque estos signos pueden no ser lo bastante graves como para justificar una atención inmediata, pueden ser persistentes y llegar a ser estresantes, por eso es tan importante llegar a la raíz de los síntomas de tu salud intestinal.
¿Has sentido alguna vez mariposas en el estómago antes de una gran presentación? Esa respuesta de ansiedad muestra cómo funciona en tiempo real tu conexión intestino-cerebro. "El estrés (o la depresión u otros factores psicológicos) puede afectar al movimiento y las contracciones del tracto gastrointestinal,"causando malestar tanto en tu intestino como en tu conexión intestino-cerebro.
Los problemas relacionados con la salud intestinal son uno de los primeros lugares a los que acuden los asesores de salud y nutrición para comprender los cambios inexplicables de peso.
Si tu intestino carece de una cantidad suficiente de ciertas bacterias beneficiosas, puedes experimentar una pérdida de peso no deseada, ya sea por malestar gastrointestinal y diarrea o por deficiencia de nutrientes. Al mismo tiempo, si tu intestino tiene demasiadas bacterias, puedes engordar (que es un efecto dominó de las sensibilidades e intolerancias alimentarias que afectan a tu organismo).
El dicho "eres lo que comes" adquiere un nuevo significado cuando se trata de la salud de tu piel. Si comes alimentos que provocan un crecimiento excesivo de bacterias, la respuesta inflamatoria de tu cuerpo puede provocar acné.
"Cada vez se cree más que la interacción entre los microbios de la piel y la inmunidad del huésped desempeña un papel importante en esta enfermedad, habiéndose encontrado una composición y actividad microbianas perturbadas en pacientes con acné."
Estudios recientes han descubierto que "personas con trastornos intestinales pueden tener mayor riesgo de desarrollar enfermedad de Alzheimer (EA)" porque "las personas con EA y trastornos intestinales tienen genes en común". Desgraciadamente, la enfermedad de Alzheimer no puede invertirse ni detenerse, pero un microbioma intestinal más sano puede ayudar a aliviar la progresión de los síntomas.
Llegados a este punto, probablemente te sientas entusiasmado y motivado para evitar cualquier riesgo asociado a una mala salud intestinal. Dado que la salud intestinal está tan interconectada con tu bienestar general, sabes que tener un "buen intestino" mejorará tu bienestar de muchas maneras.
Empieza ahora a recuperar tu salud intestinal comprendiendo mejor tu sistema digestivo, los microbios y el microbioma. Comprender qué es el microbioma, cómo funciona y cómo afecta a tu aparato digestivo serán los cimientos de un intestino más sano. Los cambios en la dieta y el estilo de vida también serán fundamentales para que tu intestino esté sano y feliz. Incluso pequeños cambios como añadir más fruta, verdura y fibra en tus comidas te ayudarán mucho.
Otra forma importante de restablecer tu salud intestinal es reducir el estrés diario. Con sencillas modificaciones en tu forma de gestionar el tiempo, las tareas, relaciones, el ejercicio y demás, tu estrés puede disminuir. El estrés no tiene por qué causar estragos en tu intestino.
Educarte en cada una de estas "áreas de mala salud intestinal" y quizás unirte a una comunidad de apoyo de personas con ideas afines te dará una ventaja para mejorar tu salud intestinal. En nuestro Gut Health Course, puedes crear una vida sana libre de problemas digestivos, ayudar a tus seres queridos y clientes a aumentar la inmunidad y reducir el estrés, y obtener un certificado en un área especializada de la salud.